¿Cuántas veces una atracción le permite a tus hijos disfrutar de varias de las cosas que más les emocionan? ¿Qué tal una en la que puedan explorar bajo el agua, ver construcciones de Lego maravillosas y mirar de cerquita tiburones y peces de verdad? Pues esto es justo lo que sucede en el submarino de Lego City: Deep Sea Adventure, el nuevo juego que se inauguró recientemente en Legoland, California.
No es nada de lo que hayas visto antes porque en realidad observar criaturas acuáticas en su hábitat rodeadas de Legos alucinantes no es de todos los días.
Todo este escenario lo disfrutas mientras vas dentro de un submarino que tiene elementos interactivos que accionas conforme vas descubriendo los tesoros ocultos que guarda el lugar por donde pasa el vehículo.
El chiste de todo es tocar las pantallas digitales que tiene el submarino para así ayudar a una minifigura de Lego a encontrar el tesoro, que está lleno de gemas, perlas, oro y monedas. En total, el recorrido dura unos cuatro minutos.
Al final de la interacción, que no es nada complicada, puedes alcanzar uno de los tres niveles, Junior, Senior o Master Explorer.
Respecto del tanque por donde navega el submarino, para darte una idea de su magnitud, ahí habitan más de 2 mil especies, entre tiburones, mantarrayas y otros peses tropicales. Merodean entre Legos con figuras como un pulpo gigante, buzos, plantas y cofres de tesoro que reposan al fondo de este pequeño “océano”.
Esta nueva atracción está localizada donde estaba hasta un par de años el campo de minigolf, a unos pasos de la entrada al parque acuático de Legoland. En la entrada hay un imponente tiburón construido con Legos y abajo una estación para que los niños armen figuras mientras avanza la línea para entrar al juego.
A la salida de la atracción continúa el entretenimiento justo en la tienda. Ahí puedes armar tus propios peces con Legos, algo para lo que te puede asesorar alguno de los encargados del local. Y no te vayas sin crear tu pez virtual, que puedes liberar para que navegue en la pantalla gigante que también abarca una pared de la tienda.
Los tiempos de espera para la atracción varían dependiendo de la cantidad de gente que visite el parque ese día, aunque en cada submarino caben unas diez personas, por lo que las filas avanzan rápido aunque haya mucha gente en el lugar. Mis hijos y yo pudimos subirnos dos veces el día que visitamos Legoland, y era un día en que había muchos visitantes.
Disfrutamos a lo grande en esa ocasión, y nos maravillaron las siempre impresionantes construcciones de Lego que adornan esta atracción. Así que antes de que termine el verano visita el parque, que tiene horario extendido. Así podrás hacer lo que hicimos en mi familia, subirte varias veces al submarino, puesto que en esta atracción, en cada recorrido que das, descubres cosas nuevas.
Fotos: Victoria Infante