Hace unas dos décadas, cuando por mi mente ni siquiera existía la más remota posibilidad -y menos el deseo- de ser madre, tuve una conversación un tanto acalorada con dos de mis hermanas, que tampoco tenían hijos.
Discutíamos si era conveniente que las abuelas se quedaran al cuidado de los nietos. “¿Quién te lo va a cuidar mejor que tu propia madre?”, dijo una de ellas. La otra la apoyó. Yo insistía en que en una guardería estarían más seguros.
Pasaron los años, y la hermana que defendió la postura de que la abuela era la mejor niñera, tuvo a sus hijos -dos- y, ¿saben qué? Nunca le pidió a mi mamá que se los cuidara.
Para entonces, otro de mis argumentos fue que las mamás de uno ya hicieron su trabajo. En el caso de mi madre, fue una megalabor: cuidó a trece hijos, y ninguno de nosotros fue un niño ejemplar, que digamos. Así que después de esa hazaña, lo mínimo que merece es un altar, no seguir torturada con el cuidado de más niños.
Pero además, tengo otros motivos para no confiarle a mis hijos (espero que mi santa madre nunca lea este post). Ella estuvo a cargo del primer nieto que hubo en la familia -eso hace 22 años-, y quedé curada de espantos. Ahora les cuento por qué.
Mi madre, a sus 73 años, es una mujer extremadamente activa, independiente e inquieta. Siempre le decimos que si la pusiéramos en un lugar desconocido, sin dinero y sin hablar el idioma, no tendría problemas para sobrevivir. Siempre ha sido así; nada en este mundo se le complica.
Sin embargo, esas características fueron las que me hicieron descalificarla cuando decidí que no llevaría a mi bebé a la guardería a los dos meses, cuando debo regresar a trabajar. Pensé que encargarle esta tarea a mi madre sería como ponerle un grillete. Sé que ella no estaría feliz y yo tampoco. Cuando cuidó a mi sobrino fue como cortarle las alas, y yo percibía que no estaba totalmente enfocada en su tarea de niñera porque el niño estuvo expuesto a muchos peligros que afortunadamente no pasaron a mayores.
Qué más quisiera yo que mi mamá fuera la típica abuelita de los cuentos, una mujer tranquila, apacible y serena. No. Mi madre es un torbellino. Y es por eso que mi pareja y yo decidimos que sería mi suegra la que estaría al cuidado del bebé por unos meses; luego el niño irá a la guardería.
Cuando mi madre se enteró de mi decisión me dijo, “Mija, si por alguna razón tu suegra no puede cuidar al tu bebé yo puedo hacerlo”. Se lo agradecí de corazón, pero la verdad no me sentiría tranquila. Además, mi pobre madre ya no tiene edad para cuidar bebés.
En resumidas cuentas, lo importante es que cuando te vayas a trabajar sientas que tu tesorito está seguro, con alguien que le va a dedicar 100 por ciento de su tiempo y atención. Y si no tuviera otra alternativa, lo llevaría a la guardería así de chiquito. Prefiero desembolsar una pequeña fortuna cada mes en colegiatura que estar angustiada pensando en que mi hijo no está -aunque suene cruel- en las mejores manos.
¿Te pasó algo similar? ¿Cuál fue tu experiencia si es que tu mamá te cuidó a tu bebé?
Claudia Martinez dice
Tengo una bebé que este día cumple 6 meses, y lastimosamente mi madre todavía trabaja como para haber cuidado a mi bebé, pero leyendo este post y después de algunas cosas que me pasaron creo que al final ha sido conveniente dejar a mi bebé con mi suegra. Mi madre solo descansa la tarde del miércoles y el jueves todo el día, pero desde hace un par de meses siempre ha puesto pretextos para cuidar a mi hija los jueves, en principio le había sugerido a mi madre que para pasar tiempo con mi nena fueran los jueves, solamente pudo unos cuantos jueves, luego de muchas negativas, he comprendido que mi madre no está tan feliz de tener que cuidar a mi pequeña los jueves, ya sea porque tiene mil cosas por hacer o porque quiere salir o descansar. En fin, creo que mi bebé está bien cuidada, aunque me cueste un recorrido de dos horas de ir y venir con la niña de un lado a otro. Gracias por la nota, muy buena!
Victoria Infante dice
Claudia, es mejor que tu bebé esté con alguien que la cuide con gusto. Qué bueno que tu suegra lo hace. En cuanto a tu mami, quizá tiene otras prioridades.
mamikatabum dice
Mi mamá y suegra son de la misma edad.
Mi mamá siempre está pendiente y dispuesta a ayudarme con los tres. Con el mayor me ayudó mucho, yo estaba acabando la universidad y ella y mis hermanas se rotaban al mayor… Sin ellas no lo hubiera podido hacer.
Ahora, aunque es joven y tiene disponibilidad prefiero no hacerlo. Confio en ella a ciegas pero tres niños son mucho y no creo que es justo. Por lo general cargo con los monkeys a todo lado, si salgo durante el día se quedan en guardería o con niñera y si es de noche, se quedan dormidos en mi casa bajo el cuidado de mamá o tía. Evito dejarlos despiertos por consideración a mi mamá.
La suegra nunca se ha ofrecido, y nunca se lo he pedido. Creo que estamos mejor así.